En la comida de hoy martes comentaba que se ha de trabajar con diversos escenarios. Pongo uno sobre la mesa: un escenario con la banca en bancarrota.
¿Qué pasaría si quiebra algún banco en España (que quebrará)? ¿Y si son varios los que quiebran? ¿Y si el fenómeno se multiplica en otros países? ¿Cómo sería un mundo con los bancos quebrados.
La idea puede parecer para muchos absurda, pero sin los planes de ayuda de los gobiernos ya habrían quebrado unos cuantos. Esta semana hemos flipado con las pérdidas del Royal Bank of Scotland (28.000 millones de libras en 2008). Solo en Estados Unidos algunos analistas como Nouriel Roubini, profesor de la Universidad de Nueva York y uno de los gurús de la debacle mundial de las finanzas, estiman en 3,6 billones de dólares las pérdidas del sector; es decir, más del doble del capital con el que parten los bancos.
El Reino Unido ha tenido que tomar el 70% del RBS para salvarle de la quiebra; los alemanes por su parte han tenido que tomar el 25% de Commerzbank mientras Deutsche Bank presentó pérdidas anuales de 4.000 millones. Y España será el siguiente: en unas semanas veremos como el Presidente que en septiembre dijo que la banca española era la más solvente del mundo mundial tendrá que justificar (por el bien de todos) la entrada del Gobierno en el capital de algún banco.
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